Los tiempos cambian y las
bibliotecas deben adaptarse y adquirir nuevas funciones para seguir siendo
útiles en la actualidad. Así lo afirma un grupo de investigadores de la
Universidad de Granada que defiende que las bibliotecas deben adaptarse a la
era de Internet y cambiar su papel tradicional.
El artículo señala que entre los
nuevos servicios pueden enseñar a los usuarios a poner en marcha un negocio,
rellenar un formulario para abrir una cuenta bancaria o aprender hábitos
alimenticios. El objetivo es que pongan a disposición de las personas todo tipo
de información útil.
Se trata de abordar la existencia
de las bibliotecas desde una perspectiva distinta. Además, es una forma de dar
respuesta al debate abierto por el periódico The New York Times sobre la
utilidad de las bibliotecas hoy en día, cuando Internet se ha convertido en la
principal fuente de información en el mundo.
A través de esta nueva propuesta
la biblioteca pasa de ser un almacén de información a convertirse en un espacio
social centrado en el usuario. De esta forma, se redefine su papel y se
justifica su existencia.