El estudio ‘Steinhardt
School Of Culture, Education and Human Development’ de la Universidad de Nueva
York ha señalado que la alimentación y el entorno juegan un papel fundamental
en el desarrollo del niño.
Factores como proporcionarles una
dieta rica en pescado, matricularlos en centros educativos de calidad o
involucrarlos en la lectura interactiva pueden ser claves para incrementar la
inteligencia de los más pequeños.
El estudio ha combinado los
resultados de investigaciones anteriores para dar a conocer los métodos que
funcionan a la hora de aumentar la inteligencia de las personas. De esta forma,
se comprobó que los alimentos ricos en Omega 3 pueden aumentar el cociente
intelectual (CI) de un niño en más de 3,5 puntos porque proporcionan bases para
el desarrollo de las células nerviosas.
El entorno es otro de los factores
principales. Dotar a los niños de una educación adecuada puede incrementar su
CI en más de 4 puntos, puesto que se les expone a situaciones complejas,
cognitivamente estimulantes y exigentes.
Por otra parte, la lectura
interactiva puede producir un aumento de 7 puntos en cociente intelectual. Involucrar
a los hijos en la lectura y leer con ellos ofrece enormes beneficios al
desarrollo intelectual del niño.
El estudio señala que estas medidas
dejan de ser efectivas a partir de los cuatro años, por lo que se recomienda
que comiencen a aplicarse lo más temprano posible.